Realidad vs. Utopía

Ella, caída sobre las hojas, se resistía al anzuelo que la jalaba desde lo alto.
Sus alas estaban rotas, ¿Cómo pretendía volar?.
Sobre su cabello y sobre sus hombros, caían las lágrimas de la luna que con su pálida cara se asomaba para entristecerse.
El tiempo la mataba, ya era poco el que quedaba. Se derretía poco a poco, más bien rápido, y las horas caían sin que pudiese evitarlo.
No soltaba las rocas, no debía hacerlo, pero no podía evitarlo.
¿Cómo habrás de luchar ahora, pequeña inocente?.
Envidiosa del vapor, que puede volar. ¿Y quién no?.
Sus manos no lo resistían, tarde o temprano tendría que darse por vencida y sería victima de algo que sencillamente no existe.
La realidad, sentada sobre el tiempo, sostenía una caña de pescar que con el fino anzuelo colgando tenía enganchada a la pobre niña, cuyo sufrimiento fue presenciado por los árboles que, junto a la luna, no paraban de llorar y de lamentarse: ¿Cómo alguien puede sufrir tanto por la realidad?.
Es la palabra que todos odiamos y amamos, deseamos y evitamos.
No soy poeta, no soy Dios, solo dejo fluir palabras bonitas. ¿Y qué?

uve.-